Veremos, a continuación, dos pequeñas historias que pueden ilustrar nuestra singular manera de evaluar el bien Vs. el mal en el curso de los acontecimientos de nuestra vida y de nuestro universo.
La araña en el urinario
Publicado por George Dvorsky 8/09/18 1:07PM rn GIZMODO
Esta historia recuerda a la Cueva de Platón, otro de los experimentos clásicos más famosos. Propuesto por Thomas Nagel en su ensayo “Nacimiento, muerte y el significado de la vida”, habla sobre el sentido de la vida. Se le ocurrió al ver una pequeña y triste araña que vivía en un urinario del baño de hombres en Princeton, donde daba clases él. La araña parecía tener una vida horrible, con todo el mundo orinando sobre ella, y “no parecía gustarle”. Así lo describía Nagel:
Poco a poco nuestros encuentros comenzaron a angustiarme. Por supuesto que ese podía ser su hábitat natural, pero como estaba atrapada por esa porcelana lisa inexpugnable, no había forma de que pudiera salir aunque quisiera, y tampoco había forma de saber si ella quería… Así que un día a finales del trimestre, cogí una toallita de papel del dispensador de pared y se la extendí.
Sus piernas agarraron la punta del papel y la levanté para depositarla en el suelo de baldosas.
Se limitó a quedarse allí, sin mover ni un músculo. La empujé ligeramente con el papel, pero no pasó nada. . . . Me fui, pero cuando volví dos horas después, ni se había movido.
Al día siguiente la encontré en el mismo lugar, y sus piernas se habían arrugado de esa manera tan característica que tienen las arañas muertas. Su cadáver permaneció allí durante una semana, hasta que finalmente barrieron el suelo. Nagel actuó por empatía, suponiendo que a la araña le iría mejor y podría disfrutar de la vida. Pero sucedió exactamente lo contrario. Al final, no le hizo ningún bien a la araña.
Esta anécdota nos obliga a considerar la calidad y el sentido no solo de las vidas de los animales, sino también de las nuestras. ¿Cómo podemos saber lo que quiere alguien realmente? ¿Y nuestras vidas de verdad nos aportan cosas buenas? También nos obliga a reflexionar sobre nuestra forma de intervenir. Y recordar que a pesar de nuestras mejores intenciones a veces podemos infligir un daño imprevisto.
Philosophical Thought Experiments, Intuitions, and Cognitive Equilibrium.
- https://doi.org/10.1111/j.1475-4975.2007.00154.x
- Thought Experiments And Philosophical Knowledge. https://doi.org/10.1111/j.1467-9973.2011.01700.x
COMENTARIO DESDE «SER LO QUE SOY»:
Desde el punto de vista de la globalidad, lo que parece bien o mal no es más que lo que es. El bien DE LA ARAÑA visto desde el hombre no equivale al bien de la araña visto desde la araña. El bien del hombre visto desde el TODO, no equivale al bien del hombre visto desde el hombre.
Mala suerte, buena suerte, quién sabe (Cuento chino)
Un granjero vivía en una pequeña y pobre aldea. Sus vecinos le consideraban afortunado porque tenía un caballo con el que podía arar su campo. Un día el caballo se escapó a las montañas. Al enterarse los vecinos acudieron a consolar al granjero por su pérdida. “Qué mala suerte”, le decían. El granjero les respondía: “mala suerte, buena suerte, quién sabe”.
Unos días más tarde el caballo regresó trayendo consigo varios caballos salvajes. Los vecinos fueron a casa del granjero, esta vez a felicitarle por su buena suerte. “Buena suerte, mala suerte, quién sabe”, contestó el granjero.
El hijo del granjero intentó domar a uno de los caballos salvajes pero se cayó y se rompió una pierna. Otra vez, los vecinos se lamentaban de la mala suerte del granjero y otra vez el anciano granjero les contestó: “Buena suerte, mala suerte, quién sabe”.
Días más tarde aparecieron en el pueblo los oficiales de reclutamiento para llevarse a los jóvenes al ejército. El hijo del granjero fue rechazado por tener la pierna rota. Los aldeanos, ¡cómo no!, comentaban la buena suerte del granjero y cómo no, el granjero les dijo: “Buena suerte, mala suerte, ¿quién sabe?”.
Cuento popular en varias tradiciones del mundo.
COMENTARIO DESDE «SER LO QUE SOY»:
Y, ni siquiera desde el punto de vista separado, podemos saber si lo que hoy nos pasa será de agradecer en el futuro o si lo que hoy agradecemos será para desdicha futura.